El impacto de los colores en la UX

Cuando diseñamos interfaces, el color tiene un papel muy importante en la comunicación. Dependiendo de los colores que utilicemos transmitiremos un estado de ánimo u otro, lo que puede influir en el comportamiento de las personas y en la forma de uso de nuestros productos.

Además, la apariencia visual siempre es lo que genera la primera impresión de un producto, y dependiendo de como sea, los usuarios estarán más predispuestos o no a utilizar el producto.

Los diseñadores pueden utilizar las teorías del color para combinarlos y conseguir la mezcla más apropiada para el producto que se está diseñando. La teoría del color es una ciencia, y los diseñadores de UX tienen que conocer el impacto que produce en los usuarios para poder utilizar las mejores opciones en cada diseño. 

¿Qué transmiten los colores?

La decisión de los expertos en UX sobre qué colores utilizar en las interfaces de usuario puede tener consecuencias incluso en las conversiones. No existe un color mágico que funcione perfectamente en todos los contextos, sino que el éxito de la elección dependerá del contexto específico en el que se aplique.

Ya os hemos hablado en otras ocasiones del significado y uso del color en las interfaces, pero nunca está de más refrescar y ampliar qué significan:

• El color rojo transmite energía, confianza y fuerza, y normalmente atrae la atención.
• El color azul tiene un efecto relajante, lo que genera confianza y lealtad. Por este motivo es uno de los colores más utilizados por las grandes empresas, como Twitter y Facebook, por ejemplo.
• El verde simboliza a la naturaleza y el respeto del medio ambiente, entre otras cosas. Al igual que ocurre con el azul, diferentes tonos e intensidades transmiten diferentes emociones.
• El color amarillo representa la alegría y llama la atención. También transmite mucha energía. Sin embargo, puede ser un color demasiado agresivo y no se debe utilizar como color principal, sino en otros elementos dedicados a llamar la atención, cómo podría ser un CTA.
• El naranja representa la creatividad y la originalidad, y de forma similar al amarillo, se puede utilizar para atraer la atención.
• El violeta representa la elegancia y la fantasía. Es un color llamativo, pero sin ser estridente, por lo que es utilizado por marcas de dulces y chocolates como Milka.
• El blanco se relaciona con la limpieza, la sencillez y la inocencia. Cuando se utiliza en publicidad se pretende transmitir un mensaje claro y limpio. Además, también se utiliza para crear espacios “vacíos”, consiguiendo esa imagen limpia. 
• El negro es elegancia, sofisticación y lujo. Es un color muy complicado de utilizar correctamente, ya que leemos mejor un texto oscuro sobre fondo claro que al contrario.

Como decíamos al principio, la teoría del color es una ciencia, pero también es un arte. Aunque generalmente los colores se asocian y representan estos sentimientos o estados de ánimo, eso no significa que no se puedan utilizar de otra forma dependiendo del contexto en el que nos encontremos.

La elección del color dependerá de los objetivos de la empresa, así como sus valores y la imagen de marca que pretenda transmitir, no simplemente por el significado comúnmente aceptado de los colores.   

Regla 60-30-10

Una regla muy utilizada para combinar los colores con éxito es la regla 60-30-10. 

Esta regla dice que lo mejor es elegir un color dominante y usarlo en el 60% del producto, otro secundario y utilizarlo en un 30%, y por último otro color que represente el 10% para destacar algunas partes como los CTA.

En definitiva, tenemos que conocer la teoría del color, pero no tenemos la obligación de seguirla al pie de la letra. Podemos jugar con los colores y crear combinaciones de colores variadas, pero siempre teniendo en cuenta que nuestro objetivo es crear mejores experiencias.