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Democratización del conocimiento y lectura fácil
La lectura fácil surge como un movimiento hacia la democratización del conocimiento. Su objetivo es simplificar la estructura y el lenguaje de los textos, manteniendo la esencia y la integridad del mensaje original. Esto significa elegir palabras de uso común, frases cortas y claras, y estructuras gramaticales sencillas, sin sacrificar la riqueza de la información.
En este blog ya hemos hablado en otras ocasiones de la lectura fácil y sobre cómo crear textos fáciles y accesibles en UX. Aquí, vamos a comentar las pautas de redacción y de diseño
Sin duda, en nuestra sociedad actual, la comprensión de los textos digitales es necesaria para todas las personas, porque forma parte de las actividades cotidianas (tanto personales, como profesionales y de ocio).
Desde niños hasta adultos mayores, pasando por personas con dificultades de aprendizaje o aquellos que simplemente prefieren información directa y sin complicaciones, los beneficiarios de la lectura fácil son tan diversos como la sociedad misma. En concreto, algunos de los grupos más beneficiados por las técnicas de lectura fácil son:
- Personas con discapacidad intelectual o del desarrollo
- Personas con dificultades cognitivas
- Personas sordas
- Personas en situaciones transitorias
Tal y como plantean Vived y Molina en el libro “Lectura fácil y comprensión lectora en personas con discapacidad intelectual”, la lectura fácil es un planteamiento metodológico general para convertir la información en accesible y facilitar la comprensión de los mensajes escritos a todas las personas, independientemente de su diversidad intelectual y de aprendizaje.
Por otra parte, dentro de las WCAG 2.2, dentro del criterio de conformidad 3.1.5 Nivel de lectura (AAA), tiene como objetivo que los usuarios puedan obtener una versión simplificada de la información compleja, y, aquí, la tarea de los especialistas en UX es crear una versión más fácil de entender cuando la información del texto sea compleja.
El contenido debe redactarse de la forma más clara y sencilla posible. La intención de este criterio de conformidad es:
- Garantizar que haya contenido adicional disponible para ayudar a comprender textos difíciles o complejos
- Establecer una medida comprobable que indique cuándo se requiere dicho contenido adicional.
Ver también:
- Nuevas pautas de accesibilidad en las WCAG 2.2
- Las WCAG 2.2 desglosadas para un futuro más accesible
Métodos de redacción de textos de lectura fácil
Crear contenido en lectura fácil implica más que usar palabras sencillas. Se trata de un enfoque holístico para crear información accesible y comprensible para todos.
Para asegurarnos de que nuestros textos son de lectura fácil, hay dos grandes bloques que tenemos que tener en cuenta: la redacción y el diseño.
Dentro del aspecto de la redacción, tendremos que tener en cuenta:
- La ortografía: uso adecuado de mayúsculas, de puntuación y signos ortográficos. Además, también es importante utilizar los números y fechas de forma estándar, evitando los números romanos.
- La gramática: evitar la voz pasiva, utilizar oraciones simples cortas (con la estructura sujeto + verbo + complementos), y, preferiblemente, utilizar el estilo directo que el indirecto.
- El léxico: utilizar palabras sencillas expresadas de forma siempre, y evitar palabras largas o difíciles de pronunciar. Otra buena práctica es evitar las abreviaturas, los acrónimos y las siglas
- El estilo: ser concisos, expresando una idea por frase y evitando introducir varias ideas o acciones en una oración simple. También es importante eliminar todo tipo de contenido, ideas, vocablos y oraciones innecesarias. En cuanto al cierre, es recomendable repetir y resumir las ideas principales.
En cuanto al diseño:
- Las imágenes: utilizar imágenes que apoyen el texto, y que sean fáciles de entender y de reconocer. Si se utiliza un color para transmitir un concepto (como bien, mal, prohibido…), es importante añadir información de refuerzo para facilitar la comprensión a personas, por ejemplo, con daltonismo. Como siempre, nunca nos podemos olvidar del texto “alt” de estas imágenes. Además, también es muy importante
- Las tipografías: utilizar tipografías sin remates, porque son más claras. También es recomendable no utilizar caracteres muy finos, ni cursivas de frases enteras en mayúsculas
- Composición del texto: hay que alinear el texto a la izquierda, no justificarlo a la derecha. También hay que organizar el texto en bloques, dividiéndolo en párrafos y capítulos cortos.
La lectura fácil no es solo una metodología; es una puerta hacia la inclusión y la igualdad de acceso al conocimiento. Al implementar las estrategias de redacción y diseño que hemos discutido, estamos dando un paso importante hacia la creación de un mundo donde todos, sin importar sus capacidades o circunstancias, puedan comprender y disfrutar del contenido que les rodea.
Este movimiento hacia la democratización del conocimiento no solo beneficia a quienes enfrentan barreras en la lectura, sino que enriquece nuestra sociedad, fomentando un ambiente de empatía, comprensión y respeto por la diversidad. La lectura fácil, en su esencia, nos recuerda que el acceso a la información es un derecho, no un privilegio, y es nuestro deber como comunicadores, diseñadores y ciudadanos comprometidos, asegurar que este derecho sea una realidad para todos.
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Foto de portada de Mia Anderson en Unsplash.