Ciberseguridad e interfaces UX – el paradigma en la interfaz de apps bancarias

Experiencia de usuario
18/7/2024
|
Torresburriel Estudio
Candado de combinación y tarjetas de crédito doradas sobre un teclado de computadora, simbolizando la ciberseguridad y protección de datos financieros.

En el mundo digital actual, la ciberseguridad es una máxima prioridad para las aplicaciones bancarias. Desde el punto de vista de la interfaz de usuario, es fundamental lograr esa incorporación de medidas de seguridad que no solo protegen a los usuarios, sino que también permiten la creación de una experiencia intuitiva y confiable para los mismos. 

Por cada acción realizada digitalmente, se registran enormes cantidades de datos sensibles, que pueden reflejar datos sobre nuestro domicilio, identidad, y accesos a las bases de sustentación como pueden ser nuestros propios datos bancarios. 

Ver también: ¿Cómo podemos mejorar la ciberseguridad desde la UX?

Es por ello, que las interfaces donde gestionamos nuestros trámites y acciones bancarias no solo deben asegurar completamente esa encriptación de datos, sino que también debe quedar reflejado y visible. Desde el momento en que las abrimos, el flujo de seguridad se integra completamente en los aspectos más visuales, para poder generar confianza en las personas usuarias. 

Ver también: Accesibilidad de contenido y buenas prácticas en aplicaciones bancarias.

Autenticación multifactor (MFA)

La autenticación por ejemplo, debe de ser ese primer paso visible. La autenticación multifactor, conocida también como MFA ya es un estándar para las aplicaciones bancarias, ya que ofrece una forma segura y conveniente de autenticación a través de procesos como la biometría, que puede ser utilizada mediante recursos como la inclusión de iconos reconocibles.. Desde una perspectiva de UI, esto se traduce en los siguientes puntos:

  • Pantallas de inicio de sesión claras y concisas: la UI debe guiar al usuario a través del proceso de autenticación de manera intuitiva, con indicaciones claras para ingresar su contraseña y un segundo factor, como un código enviado por SMS o una verificación biométrica.
  • Indicadores de progreso: la inclusión de barras de progreso o señales visuales que indiquen al usuario en qué paso del proceso de autenticación se encuentra puede ser bastante útil.
  • Diseño accesible: asegurarse de que las pantallas de autenticación sean fácilmente accesibles para todos los usuarios, incluyendo aquellos con discapacidades.
  • Iconos y botones de fácil acceso: incluir iconos reconocibles para la autenticación biométrica, como una huella digital o una cara, en la pantalla de inicio de sesión.
  • Feedback visual: proporcionar feedback visual inmediato cuando se reconoce correctamente la biometría, como un check verde o una animación de éxito.

Anteriormente mencionamos la parte que no se ve al usuario pero que a la vez es crucial: la encriptación. La tarea de la interfaz en este punto es comunicar de manera efectiva la seguridad de la aplicación. La monitorización de actividad debe ser transparente y proactiva, y esto se puede conseguir a través del uso de notificaciones y banners dentro de la aplicación para alertar a los usuarios sobre actividades sospechosas o inusuales en su cuenta. 

En caso de ser necesario, proporcionar a los usuarios un panel de control donde puedan ver sus actividades recientes y reportar cualquier transacción sospechosa fácilmente es un “must”. 

Las interfaces deben guiar a los usuarios hacia comportamientos seguros sin ser intrusivas: esto puede conseguirse con ejemplos que brindan al usuario mayor información de cómo realizar acciones con mayor índice de seguridad, pero sin imponerlo. 

Diseña formularios que:

  • Sugieran automáticamente contraseñas seguras
  • Ofrezcan indicadores de fortaleza de la contraseña
  • Incluyan mensajes de confirmación antes de realizar transacciones importantes. 

Esto permite a los usuarios revisar los detalles y asegurarse de que todo esté correcto sin haber interpuesto en él un fallo en la confianza al hacerle sentir obligado. 

Formas de gestionar sesiones de acción

Por último, es absolutamente esencial la forma en la que se gestionan las sesiones de acción en los usuarios. Existen varios aspectos importantes que deben ser considerados, y proponemos varios puntos que pueden ser claves para un manejo eficaz de estas sesiones.

Cierre automático de sesión

El cierre automático de sesión ayuda a proteger la información del usuario cuando no está activo. A través del feedback mencionado anteriormente, por medio de temporizadores visibles antes de que se pueda cerrar automáticamente por inactividad o el uso de alertas previas, ayudará enormemente a los usuarios.

Notificaciones de acceso IRT

Notificar a los usuarios sobre nuevos accesos a su cuenta es crucial para la seguridad. Esto puede hacerse a través de notificaciones inmediatas y visibles dentro de la aplicación cuando se detecta un nuevo acceso desde un dispositivo o ubicación no reconocidos, permitiendo al usuario la libertad de cerrar dichas sesiones en caso de no reconocerlas

Posteriormente, crear esa pantalla de revisión, con historiales y datos respecto a cada una de esas sesiones supondrá al usuario una visión global de quién ha accedido a su cuenta, generando así confianza.

Para finalizar, la seguridad en aplicaciones bancarias no debe comprometer la experiencia del usuario. Ahora que conoces estos tips, implementa estas prácticas y ofrece a tus usuarios la confianza que necesitan para sentirse seguros al utilizar tus servicios.


Foto de portada de Towfiqu barbhuiya en Unsplash.

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